Son Goku (孫悟空, Son Gokū) es el protagonista principal del manga y anime de Dragon Ball creado por Akira Toriyama. Su nombre real y de nacimiento es Kakarotto (カカロット, Kakarotto «Kacarrot» en saiyano en alfabeto saiyano) y es uno de los pocos saiyanos que lograron sobrevivir a la destrucción total del Planeta Vegeta del Universo 7. Es el segundo hijo de Bardock y Gine, hermano menor de Raditz, nieto adoptivo de Son Gohan, esposo de Chi-Chi, padre de Son Gohan y Son Goten, a su vez también es el abuelo de Pan y ancestro de Son Goku Jr.
Originalmente enviado a la Tierra como un infante volador con la misión de conquistarla. Sin embargo, el caer por un barranco le proporcionó un brutal golpe que si bien casi lo mata, este alteró su memoria y anuló todos los instintos violentos de su especie, lo que lo hizo crecer con un corazón puro y bondadoso, pero conservando todos los poderes de su raza. No obstante, en la nueva continuidad de Dragon Ball se establece que él fue enviado por sus padres a la Tierra con el objetivo de sobrevivir a toda costa a la destrucción de su planeta por parte de Freeza. Más tarde, Kakarot, ahora conocido como Son Goku, se convertiría en el príncipe consorte del monte Fry-pan y líder de los Guerreros Z, así como el mayor defensor de la Tierra y del Universo 7, logrando mantenerlos a salvo de la destrucción en innumerables ocasiones, a pesar de no considerarse a sí mismo como un héroe o salvador.
Debido a una contusión en la cabeza durante su infancia, la cual casi termina con su vida, Goku padeció de amnesia y perdió su naturaleza agresiva y el deseo de destrucción que caracteriza al instinto innato de los saiyanos. Tras ese accidente, se convirtió en una persona noble, alegre, calmada, a quien era muy difícil hacerlo enfadar hasta el extremo de rozar la inocencia, al punto de ser incapaz de corromperse con las técnicas del demonio Akkuman, cuya técnica especial Resplandor del Diablo aprovecha los mínimos ápices de maldad en el alma de los contrincantes para hacerlos explotar, ya que Goku poseía un corazón limpio e inocente. Esta característica también protege a Goku cuando se enfrenta al hechicero Bobbidi, ya que Bobbidi puede manipular fácilmente a todos aquellos cuyos corazones tengan maldad. Aún así pudo mantener todas las características biológicas de su raza. Si Goku no hubiera sufrido este golpe, Toriyama dijo que Goku hubiera tenido la misma apariencia y personalidad que Tullece, ya que creó a Turllece como la parte negativa de Goku. Goku Black también es un claro ejemplo de ello.
Goku cría a su hijo Gohan bajo estas mismas condiciones, haciéndolo humilde y simpático, con la diferencia de que Gohan estudia demasiado y es muy inteligente en aspectos científicos, en parte por lo estricta que es su madre.
Fiel a su raza, Goku posee un espíritu combativo sumamente marcado, y es incapaz de resistirse a pelear con alguien que le parezca fuerte aun en los momentos más inoportunos. Es extremadamente competitivo y entrena constantemente, ya que nunca está satisfecho con su fuerza actual y siempre busca ir más allá. Su fijación en este aspecto puede catalogarse de obsesión, pues da prioridad absoluta a su entrenamiento casi por encima de cualquier cosa. Es por esto que, a pesar de que ama a su familia y los protege siempre que es necesario, no es en absoluto una persona familiar y una vida tranquila y apacible pronto se le vuelve aburrida, razón por la cual a menudo prefiere marcharse y abandonar a su familia por largos periodos de tiempo para concentrarse en entrenar y mejorar como guerrero.
Goku posee poco pudor al mostrar su cuerpo, ya que en diversas ocasiones se ha exhibido desnudo frente a la gente. Por ejemplo: frente a la reina serpiente, frente a su grupo de amigos más cercanos al salir de los baños termales o para meterse a un lago para obtener una Esfera del Dragón.
Por más que, paradójicamente, sea el guerrero más fuerte de todo el universo, no está exento de tener debilidades. Su mayor debilidad es ser fácilmente manejable por su temperamental y dominante esposa Chi-Chi (le forzó a sacar una licencia de conducir y a trabajar como granjero, enfurecida por su holgazanería). Por eso Piccolo decía que los Supersaiyanos también tienen puntos débiles (mencionado en el anime Dragon Ball Z). En Dragon Ball Super, Goku aceptaría más tarde que Chi-Chi le gustó justo por eso, por ese temperamento tan fuerte, y Vegeta le asevera que esto es porque las mujeres saiyanas tienen ese carácter. Otra debilidad exclusiva solo del anime es su tripanofobia (fobia a toda clase de objetos puntiagudos) como inyecciones, agujas o cualquier cosa que pinche con las que se asusta con facilidad.
Dado a que buena parte de su infancia la pasó viviendo solo en las montañas tras la muerte de su abuelo, Goku inicialmente carecía de conocimientos comunes cotidianos o académicos. Era incapaz de saber si una persona era hombre o mujer sin antes tocar su cuerpo y no tenía un juicio muy desarrollado, por lo que podía tomarse las cosas de manera literal sin terminar de entender el contexto de la situación. Esto queda evidenciado en la ocasión en la que un Pteranodon secuestra a Bulma y le dice sarcásticamente que van a conversar un rato y que los espere, a lo que Goku hace caso sin darse cuenta del peligro y sin actuar hasta que la misma Bulma se lo pide.
Mas allá de eso, Goku posee una educación básica por parte de su abuelo, siendo capaz de leer como demostró en su estadía con Kame Sen'nin, y algunas enseñanzas como tratar bien a las chicas. Si bien a lo largo de los años Goku logró adaptarse en gran medida al mundo más allá de la Montaña Baozi, aún suele demostrar cierto grado de ignorancia e ingenuidad.
A pesar de su escasa formación intelectual, siendo las matemáticas su punto más flaco (mencionado en el examen del Torneo de la Asociación Universal de las Artes Marciales en Dragon Ball Super), es en batalla un consumado artista marcial, poseedor de una gran habilidad para combatir, con capacidad de aprendizaje sumamente elevada (aprendió a hacer el Kamehameha al verlo solo una vez), capacidad de superar sus límites en pleno combate, y su buen dominio de la estrategia.
Con el paso de los años, Goku se vuelve muy confiado a la hora de luchar y lo hace de manera muy despreocupada, como se puede ver en La Resurrección de 'F', lo que hace que su cuerpo se haga vulnerable y tenga puntos débiles ante enemigos débiles.
